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El Origen del Afeitado a Navaja

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El Origen del Afeitado a Navaja

Se han identificado navajas de muchas culturas de la Edad del Bronce. Estas estaban hechas de bronce u obsidiana y generalmente eran de forma ovalada, con una pequeña espiga que sobresalía de uno de los extremos cortos.

A lo largo de la historia se utilizaron varias formas de navajas de afeitar, que son de apariencia diferente pero de uso similar a las navajas de afeitar modernas.

 

En tiempos prehistóricos, las conchas de almejas, los dientes de tiburón y el pedernal se afilaban y se usaban para afeitarse. Se encontraron dibujos de tales hojas en cuevas prehistóricas. Algunas tribus todavía usan hojas de pedernal hasta el día de hoy. Las excavaciones en Egipto han desenterrado navajas de oro macizo y cobre en tumbas que datan del cuarto milenio antes de Cristo.

 

La primera navaja de afeitar moderna completa con mangos decorados y hojas de tierra huecas se construyó en Sheffield, Inglaterra, el centro de la industria de la cuchillería, en los siglos XVIII y XIX. Benjamin Huntsman produjo el primer grado superior de acero duro, a través de un proceso de crisol especial, adecuado para su uso como material de cuchillas en 1740, aunque fue rechazado por primera vez en Inglaterra. El proceso de Huntsman fue adoptado por los franceses algún tiempo después; aunque de mala gana al principio debido a sentimientos nacionalistas. Los fabricantes ingleses se mostraron aún más reacios que los franceses a adoptar el proceso y solo lo hicieron después de ver su éxito en Francia. El acero Sheffield, un acero muy pulido, también conocido como acero Sheffield plateado y famoso por su acabado de brillo intenso, se considera un acero de calidad superior y todavía lo utilizan en Francia fabricantes como Thiers Issard.

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En los siglos XVIII y XIX, los ricos tenían sirvientes que los afeitaban o podían frecuentar las peluquerías. El afeitado diario no era una práctica generalizada en el siglo XIX, por lo que algunas personas nunca se afeitaban. La costumbre de afeitarse todos los días es una innovación del siglo XX que se inició después de la Primera Guerra Mundial. Los hombres debían afeitarse todos los días para que sus máscaras antigás se ajustaran correctamente y esto se volvió mucho más fácil con la llegada de la maquinilla de afeitar de seguridad.

 

Las navajas de afeitar eran la forma más común de afeitarse antes del siglo XX y siguieron siendo comunes en muchos países hasta la década de 1950. Los barberos fueron entrenados especialmente para darles a los clientes un afeitado rápido y completo, y una colección de navajas de afeitar listas para usar era algo común en la mayoría de las barberías. Los barberos todavía las tienen aunque su uso está limitado.

 

Las navajas de afeitar finalmente pasaron de moda y se incorporo al mundo del afeitado la maquinilla. La primera fue fabricada por King C. Gillette: una maquinilla de afeitar de seguridad de doble filo con hojas reemplazables. La idea de la maquinilla de Gillette fue el uso del concepto de «líder en pérdidas», en el que las maquinillas de afeitar se vendían con pérdidas, pero el las cuchillas de repuesto obtuvieron un alto margen y proporcionaron ventas continuas. Tuvieron un éxito inmenso debido a las campañas publicitarias y los lemas que denigraban la eficacia de la navaja de afeitar y cuestionaban su seguridad.

 

En 1960, se dispuso de hojas de acero inoxidable que podían utilizarse más de una vez, lo que redujo el coste del afeitado con maquinilla de afeitar de seguridad. Las primeras hojas de este tipo fueron fabricadas por la firma Wilkinson, famosa fabricante de espadas ceremoniales, en Sheffield. Pronto Gillette, Schick y otros fabricantes estaban fabricando hojas de acero inoxidable.

En la actualidad han vuelto las Navajas Barberas de Afeitar, son verdaderas joyas, con terminaciones en las chachas que son verdaderas maravillas y las hojas de acero carbono y acero inoxidable.

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